Día-1: realidad

Esto va a ser breve, como he repetido hoy tantas veces, soy persona y también necesito mis horas de sueño. Solo va a ser un apunte para auto-corregirme. Recuerdas cuando hace un mes te decía: “que triste, que empiezan las despedidas..... o.... que “stress maletero“ dios mio¡“ pues nada de nada monada, eso era un paseo de rosas¡ Esta semana si que fue dura, si que llegaron las verdaderas despedidas, los míticos “e ten cabeciña“, “ con sentidiño eh“, los regalos pre-partida, los últimos abrazos... Y, siendo sincera, aunque no se note mucho, es duro. Lo sé, todos lo sabemos. Supongo que lo llevamos tan asumido que parece que ni se nos nota. Y por esa misma razón, si no te importa, voy a mandar un mensaje a mi madre. Se que cuando leas esto ya tendrás a tu hija mayor a miles de km y no te preocupes si me ves llorar en el aeropuerto, porque aunque no sea normal en mi, hay situaciones que superan los límites establecidos. Pero bueno, que me voy del tema, que no lo pases mal vale, que ten quedan 3 tremendos hijos con los que lidiar y ya sabes que pienso llegar para felicitarte en persona por tu cumpleaños. Supongo que para eso se inventaron los blogs, para decir lo que a la cara resulta bastante difícil. Queridos “resto de la familia“, que a vosotros también os quiero mucho hombre, que cada uno tendrá su momento y su dedicatoria, no os alarméis, pero tenéis que admitir que esta se la merecía ella.
Y otra cosa importante es darle las gracias a los pedazo de amigos que tengo, porque se lo curran todo muchísimo, y voy a extrañar esas clases, esas tardes, hasta los exámenes con croquis de la clase incluidos. Pues por vosotros, porque os lo merecéis.
Y repito (ya soy cansina y todo) que nos os preocupéis, ME LO VOY A PASAR EN GRANDE¡

Fdo: Ave Divagante